Hace unos años os contaba en un post que por motivos laborales mi vida de lunes a viernes transcurría al norte de la provincia de Granada, en Huéscar. Hoy era mi último día en la que ha sido como mi casa durante diez años. He pasado allí mucho tiempo, así que voy a echar de menos muchas, muchísimas cosas: el insti, el borrego de los nuevos y el arroz de los veteranos, ir en bici a trabajar, el padel, los churros, las clases de guitarra y la cerveza en los Jardines, comprar en el mercado, llevarme cordero en vacaciones, escuchar a la gente decir «pijo» «qué giro» «zagales» o «aluegoluego», a los compañeros de atletismo Huéscar (y Galera…) que me llevaban con la lengua fuera, la chimenea del Pedreño y el vino del país, ir a correr y cruzarme con ardillas por el camino de las Santas, los jueves de los maestros en el UFE, el X o el Pepillo…Y por supuesto, voy a echar de menos a todos los que han compartido conmigo esos momentos y han hecho los duros inviernos del altiplano más llevaderos. Empiezo una nueva etapa en un nuevo centro y con nuevos compañeros, espero estar por lo menos la mitad de bien. Gracias a todos.
Me ha encantado tu comentario; lo he entendido perfectamente ya que he vivido situaciones similares. La vida continua y esta ha sido una hermosa página que ya has escrito en el libro de tu vida. Un fuerte abrazo. ¡Adelante!
Me alegro mucho por ti y tu familia! Para que podais disfrutar juntos todos los días, como yo he disfrutado de ti, todas las mañanas, de lunes a viernes en el IES Aquivira y en la Escuelande Artes. Gracias por todo, te deseo lo mejor. Ya sabes, buscame plaza en tu instituto!!!