Esta mañana me he encontrado en la puerta de mi casa con dos simpáticos visitantes y les he invitado a entrar, con la condición de que me dejaran hacerles algunos retratos. Se han portado como auténticos profesionales y (más o menos) me han dejado trabajar. Al final creo que no se querían ir de lo bien que se lo estaban pasando. A ver si vuelven otro día, que ya les tengo preparado un nuevo escenario 😉
Fantasticas!!
Gracias Elisa, estos bichitos son fotogénicos…
Por fin he conocido la pecera. Cuentas tantas cosas de la pecera photography y nunca habia salido en las fotos. ; )
Jeje, te vamos a echar de menos compañero!